• May 14, 2024, 11:53 pm
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Transición y esperanza de cambio: Nicmer Evans analiza los retos de Edmundo González hacia la presidencia de Venezuela

Transición y esperanza de cambio: Nicmer Evans analiza los retos de Edmundo González hacia la presidencia de Venezuela

Transición y esperanza de cambio: Nicmer Evans analiza los retos de Edmundo González hacia la presidencia de Venezuela

Transición y esperanza de cambio: Nicmer Evans analiza los retos de Edmundo González hacia la presidencia de Venezuela


Desde la redacción Hasta que Caiga la Tiranía.-

Edmundo González Urrutia pasó de ser una figura muy poco conocida en la escena pública al candidato que lleva sobre sus hombros el peso de una transición democrática en Venezuela. Diplomático de profesión, con experiencia política y peso dentro de la oposición venezolana, González Urrutia, a sus 74 años, aspira por primera vez a un cargo de elección popular, y ha asegurado que asume este ¨desafío¨ sin ¨aspiraciones personales¨.

Tal como lo ha afirmado Edmundo González, en su primer mensaje al país, la ruta hacia las presidenciales del 28 de julio es un desafío que implica superar grandes obstáculos. Para ello, en Hasta que Caiga la Tiranía conversamos con el politólogo Nicmer Evans, quien nos ofreció análisis y lectura sobre este escenario que ha revivido la esperanza de cambio en el país.

Ya tenemos candidato, ¿ahora qué?, consultamos a Evans, quien puso sobre la mesa un aspecto que es importante recordar, y es que hay que tomar en cuenta que puede haber modificaciones de las candidaturas hasta 10 días antes de las elecciones. En ese sentido, indicó no querer ser ¨poco optimista¨, sin embargo, uno de los mayores retos que se enfrenta es el riesgo permanente de la inhabilitación de Edmundo González o de la tarjeta de Plataforma Unitaria.

Ahora, asumiendo el escenario esperado en el que Edmundo González sea el candidato, Evans subrayó la necesidad de un despliegue por parte de los líderes y organizaciones que apoyan la candidatura para desarrollar una campaña persuasiva, tomando en cuenta que ¨Edmundo no es un hombre de movilización, es un hombre que por una coyuntura específica y de manera sobrevenida, es un candidato¨.

¨Esto va a implicar entonces el diseño de un despliegue por parte del resto de los líderes y organizaciones que apoyan la candidatura de Edmundo para que la campaña sea simultánea, plural, diversa, y que se pueda desplegar a los cuatro costados del país en un ejercicio de conciencia cívica. Más que una campaña, va a ser una protesta nacional por el voto¨, agregó.

¨Ahora hay que poner a Edmundo a subir cerro¨, expresó Evans; pero aclaró que no lo dice de forma literal, sino en sentido de que ¨el mensaje de unión y de organización para la elección sea el resultado de una convocatoria clara, nítida, que no genere ningún tipo de ruido, que no genere ningún tipo de confusión¨. En ese orden de ideas, Evans argumentó que Edmundo debe conectar con los venezolanos con base en las necesidades básicas.

¨Hay un principio de marco de rescate, reconstrucción de la democracia en el país, de la vuelta del Estado de Derecho y Justicia, pero eso debe traducirse desde el punto de vista conceptual o teórico en elementos prácticos en relación al tema de cómo generar desarrollo económico en el país, de cómo revalorizar el salario, de cómo generar mejores condiciones para la protección social, en especial de los adultos mayores, el tema de la salud, el tema de los servicios públicos¨, apuntó.

La ciudadanía asume un rol estelar

Otro aspecto subrayado por el politólogo y profesor universitario, es que la ciudadanía desempeña un rol clave en la defensa del voto y en ejercer presión para que este escenario de transición pueda ser viable. Para ello, Evans aseguró que lo primero que se debe hacer es evitar cualquier tipo de provocación y violencia. Además, comprometerse con la organización para la movilización y defensa del voto.

¨Creo que la ciudadanía no debe esperar por los partidos políticos para organizarse en función de la defensa del voto y de la contraloría electoral (…) no solamente son los testigos de los partidos ni los miembros de mesa, también es el ejercicio de la gente en la calle, en los centros de votación, en las mesas, exigiendo que se haga todo para el resguardo de los procedimientos adecuados establecidos en el sistema electoral, y también para el tema del conteo de voto y de transmisión, que sin duda alguna van a ser clave, especialmente articulados con los comandos de campaña¨, indicó.

Transición en paz, sin impunidad

Respecto a la propuesta de plebiscito establecida por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, y el presidente de Brasil, Lula da Silva, Evans señaló que lo ideal no sería un plebiscito, sino un proceso de negociación previo que genere garantías para la transición, sin impunidad, pero con elementos de reconciliación nacional.

¨Aquí lo que hay que generar es un proceso de negociación de garantías para la transición, y la transición debe incorporar justicia transicional. Yo no creo que el pueblo venezolano vaya a soportar impunidad, pero creo que el pueblo venezolano también quiere reconciliación. Entonces tiene que buscarse un punto medio, y ese punto medio no se va a reflejar en unas condiciones plebiscitarias para salvaguardar la impunidad de quienes han estado en el poder solamente por la impunidad misma¨, manifestó.

¨Es que incluso las amnistías y la libertad de los presos políticos, la lucha contra la corrupción, y todos estos elementos que tienen que estar presentes en una discusión a este nivel, pues tienen que ser un elemento concertado. Creo además que, sin duda alguna, debe ser parte de este tiempo de campaña electoral para tener acuerdos previos¨, añadió.

Evans recalcó que, dándose el escenario de la victoria de la oposición, quedan seis meses para acordar los elementos de transición de entrega del gobierno y para definir los términos en los cuales actuará el Ejecutivo.

Con relación a ello, precisó que ¨no solamente debe hablarse de un acuerdo para la transición desde el punto de vista de la seguridad y la preservación de quien se ha derrotado, sino que además debe haber un acuerdo para la gobernabilidad del país de quien tenga la victoria, si en este caso es de la oposición¨.

¨Si la oposición gana, la necesidad de un acuerdo de gobernabilidad en donde la división de poderes no empiece a profundizarse, a establecerse, pero que no exista saboteo entre los poderes, es uno de los elementos fundamentales, porque el Ejecutivo va a ser objeto inevitablemente de saboteo del resto de los poderes hasta su renovación¨, explicó.

Gobierno de concertación nacional y pluralidad

Evans enfatizó que Edmundo González, tal como lo dejó ver en sus primeras declaraciones como candidato, comprende que representa un gobierno de transición que busca concertación nacional y con amplio espectro de pluralidad.

¨Un gobierno de Edmundo González debe asumirse profundamente como un gobierno de transición que busque estabilizar y armonizar las confrontaciones de los distintos sectores que van a estar en pugna en pleno ejercicio del poder, para tratar de alinear todas las fuerzas necesarias para emprender la transformación que demanda el país¨, manifestó.

En esa misma línea, sostuvo que ¨no debe ser o pretender ser vengativo¨, sino abocarse a la reconstrucción del Estado de Derecho y Justicia. ¨Debe hacer el ejercicio de la reconstrucción de una condición democrática que parte del hecho de una división de poderes, y para ello, sin duda alguna, tiene que garantizar el hecho de que estos poderes puedan ser renovados y actualizados de manera pronta¨.

Para ello, Evans indicó que habría que evaluar si una de las primeras medidas de Edmundo González deba ser la convocatoria a una constituyente; pero destacó que las constituyentes en América Latina se han desprestigiado al ser utilizadas como ¨un instrumento de manipulación para el ejercicio de la hegemonía del poder¨.

¨Si aquí, por el contrario, se plantea un poder constituyente para revertir la hegemonía del poder y para restablecer las condiciones democráticas, que además convoque de manera inmediata o lo más próximo posible la remoción de todos los cargos públicos, mientras en paralelo va desarrollando un ejercicio de modernización y desarrollo de la economía, (…) sin duda alguna va a haber voluntad de avanzar en la profundización del cambio, y esta profundización del cambio podrá darse llamando a un proceso constituyente¨, dijo.

No obstante, recordó que el proceso constituyente difícilmente podrá ser convocado si no se tiene mayoría en la Asamblea Nacional. Por lo tanto, afirmó que el primer reto, desde el punto de vista político, para Edmundo González Urrutia, siendo presidente, sería organizar las condiciones necesarias para que haya elecciones de la Asamblea Nacional lo antes posible.

¨Un escenario positivo, a partir del 28 de julio, y proyectándose hacia el año que viene, es el de organizar absolutamente todas las condiciones necesarias para que haya unas elecciones de la Asamblea Nacional lo más pronto posible, y este poder se pueda renovar, y a través de la renovación de la Asamblea Nacional, se pueda incidir de manera rápida y eficiente hacia la convocatoria de un proceso constituyente que pueda llevar a una pronta renovación de los poderes, en donde haya unas elecciones presidenciales libres y Edmundo haya cumplido su función de gobierno de transición, o se analice el escenario, por el éxito de su gestión, de poder aspirar nuevamente, eso sería totalmente legítimo¨, expuso.

En definitiva, son muchos los retos que aún quedan por enfrentar; pero la realidad absoluta es que podemos ver un país comprometido en movilizarse y defender el voto para una transición que, así como expresó Nicmer Evans, sea plural, transparente y justa. Estamos en un momento histórico que podría marcar un hito en Venezuela, por lo tanto demanda unión, sabiduría, inclusión y una visión de futuro clara que permita recuperar la confianza y poner en marcha un país que ha sufrido una destrucción profunda, desde hace más de 20 años.