Condiciones infrahumanas imperan en nueva cárcel del Rodeo I

Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía

Grave la situación de los presos políticos en El Rodeo I, el nuevo campo de concentración de Nicolás Maduro. Sin electricidad ni agua pasan los días; mientras las raciones de alimentos son escasas y las visitas bajo control militar, contándose como escoltas una proliferación de insectos que causan más enfermedades entre los reclusos, denunció este lunes desde el exilio el exfiscal Zair Mundaray por la red social X.

Mundaray describió que, según sus fuentes, en este establecimiento carcelario cuando hay agua les permiten duchas de menos de dos minutos y para los enfermos, piden a los familiares medicamentos, porque ni siquiera hay lo más elemental para atenderlos.

“Uno de los detenidos por corrupción en la trama Pdvsa-cripto está en enfermería, algunas fuentes dicen que es producto de torturas por funcionarios que buscan el dinero sustraído. La violación de los derechos humanos se intensifica en estos días”, aseveró el exfiscal.

Esta denuncia también la formuló la defensora de los Derechos Humanos, la abogada Tamara Sujú, quien advierte que mientras Venezuela se sucumbe en la distracción política, en el RODEO I “están torturando al Capitán Antonio Sequea, y todos los demás presos políticos, de lo cual hacemos responsable al régimen de Nicolás Maduro y a su línea de mando de sus vidas”.

El capitán Sequea fue sentenciado a 30 años de prisión por “rebelión” por el fallido golpe de Estado que llegaron denominar “Gedeón”, y sus familiares denuncian que recibe malos tratos en condiciones de precariedad.

En su informe "Licencia para matar y torturar" que presentó la abogada en Madrid, España, Sujú describe cómo son las "renovadas cárceles", donde no existen luz ni ventilación, además del mensaje que emana la cadena de mando de las torturas ante los crímenes de lesa humanidad que se están cometiendo en esta nación: "yo tengo licencia para asesinar con autoridad e impunidad" a cualquier militar o civil para infundir el terror entre quienes se atrevan a alzarse o disentir. Citó casos como el del concejal adeco Fernando Alván o el del teniente Acosta Arévalo.

Un nuevo "campo de concentración", sintetizó donde Nicolás Maduro somete a presos políticos a torturas y tratos crueles e inhumanos, así lo describe el abogado penalista esta cárcel.

A estas denuncias también se plegó, este lunes, la Coalición por los Derechos Humanos y la Democracia, la cual recordó que el capitán Antonio Sequea fue imputado por la fuga del dirigente político de Voluntad Popular, Leopoldo López, en octubre de 2020.

Desde esa fecha, Sequea permanece detenido al ser vinculado en la denominada Operación Gedeón, primero, en la cárcel de Ramo Verde y ahora en El Rodeo I.

Según la ONG, el capitán fue sentenciado en 2020 a 30 años de prisión por su aparente participación en el caso Gedeón y luego en 2023 fue acusado por otro caso.

Y la tarde de este domingo, su hermana Fátima Sequea, denunció en sus redes sociales que el militar ha perdido peso de forma considerable desde que fue llevado a ese centro de reclusión; reveló que “solo le permiten tener agua por dos minutos y la celda en la que se encuentra, es un horno lo cual lo deshidrata”.

Así como Sequea, existen más de 250 presos políticos, entre militares, civiles y activistas sociales encarcelados por manifestar en contra del régimen madurista, la mayoría sin el debido proceso, contraviniéndose los más elementales derechos humanos de presunción de inocencia.

La reconocida periodista Sebastiana Barráez en entrevista en el programa Enler García TV, explicó que el capitán Sequea, trabajó en los centros de tortura SEBIN y DGCIM como subalterno de Hernández Dala, Gustavo González López y Cristopher Figuera. Y llevó a cabo la fallida “Operación Gedeón”, operación infiltrada por Diosdado Cabello.

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Publicación : 29/04/2024 18:22 PM