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Educadores venezolanos no tienen nada que celebrar

Educadores venezolanos no tienen nada que celebrar

Educadores venezolanos no tienen nada que celebrar

Educadores venezolanos no tienen nada que celebrar


Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía.-

No realizaron las acostumbradas actividades con motivo del Día del Educador en gran parte de Venezuela. No tienen nada que festejar. Lo que exigen es salarios dignos y mejores condiciones de vida que el régimen les ha cercenado, hasta eliminados beneficios contractuales; pero cansados de tantos reclamos lo que más añoran es el cambio político. La única manera para recobrar calidad de vida.

Considerada la “madre de todas la profesiones”, pero poco le ha importado al régimen de Nicolás Maduro, período en que se ha gestado la mayor deserción de los educadores, que han preferido volcarse a la economía informal o emigrar para sobrevivir. Tanto que las escuelas han quedado huérfanas.

Se estima que 96 mil docentes emigraron de Venezuela, en los últimos años y el régimen para suplir esta deficiencia, recurre a bachilleres para impartir las clases, cuando no están formados académicamente.

Desmejoras y salud mental en detrimento

La discusión de su convención colectiva, única y unitaria continúa paralizada: lo del escalafón quedó en letra muerta, los del máximo nivel si apenas rozan los 30 dólares en lo equivalente a bolívares. Las primas por familia y otros beneficios de seguro, HCM pasaron a la historia.

Y son el gremio con más actividades de calle, pero sus llamados no son atendidos y ni esperanzas que lo sean ante un régimen ensordecido, que más bien sufren los rigores de la dictadura con hostigamiento, persecución y amenazas, refirió a la prensa Luis Guillermo Padrón, del Sindicato Venezolano del Maestro.

Incluso a algunos se les pretende obligar a renunciar a su cargo, pese a que es el régimen quien les incumple desde hace más de tres años.

Tienen conocimiento que desde el Centro de Desarrollo de la Calidad Educativa se emiten órdenes para que le inicien procedimientos administrativos a los docentes que no quieran trabajar más de tres días a la semana. Esto lo hacen, pese a estar consciente de que quien asuma esa posición es porque el salario que recibe no le alcanza.

Padrón reveló que tienen conocimiento de que algunos supervisores y directores, supuestamente reciben un bono de corresponsabilidad y confiabilidad, entre 15 mil y siete mil bolívares, por ser personas de confianza.

Comparó estos ingresos con el salario base de los docentes, que es de 400 bolívares y por eso no pueden asistir todos los días a clases.

Sugieren que todo procedimiento que se considere arbitrario debe ser pasado por escrito, según lo establecido en el Reglamento del Ejercicio de la Profesión Docente, la Ley de Educación, el contrato colectivo y la Ley del Trabajo.

Retroceso en la historia

El secretario general de Sintraenseñanza, Juan Tortolero, citó que este miércoles se cumplen 93 años del inicio de la lucha de los docentes por mejores condiciones económica, liderada entre otras personas por el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa, en medio de plena dictadura gomecista, cuyos restos irónicamente serán llevados hoy al Panteón Nacional para pretender ganar “tributos” con su nombre cuando ha sido el periodo más nefasto para la educación venezolana.

“A 93 años los docentes exigimos el cumplimiento de la ley y el respeto a la dignidad del ejercicio de la profesión”. Aun así se mantienen en lucha por sus reivindicaciones económicas.

En Venezuela se celebra el Día del Maestro, para recordar el 15 de enero de 1932 cuando, durante la dictadura del general Juan Vicente Gómez, educadores conformaron la Sociedad Venezolana de Maestros de Instrucción Primaria para defender los derechos laborales de los docentes y mejorar la educación en el país.

Cuatro años más tarde, en 1936, se convocó a la Primera Convención Nacional del Magisterio, asamblea de la que se originó la Federación Venezolana de Maestros. Más tarde, en 1945, se decretó el 15 de enero como Día del Maestro, para homenajear a los educadores hoy una de las profesiones venida a menos en Venezuela y en la que se registran mayores problemas de salud mental.