• April 26, 2025, 10:18 am
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Justicia fallida en Colombia: “El embargo fingido contra Alex Saab”

Justicia fallida en Colombia: “El embargo fingido contra Alex Saab”

Justicia fallida en Colombia: “El embargo fingido contra Alex Saab”

Justicia fallida en Colombia: “El embargo fingido contra Alex Saab”


Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía.-

Lo que acaba de ocurrir en Colombia es un escándalo institucional: el “embargo fingido” contra Alex Saab, el testaferro de la dictadura de Nicolás Maduro. Representa el engranaje del sistema criminal y corrupto del régimen chavista; toca el tono podrido de la trama corrupta nunca imaginada en la historia reciente de Venezuela.

Pero, ¿qué fue lo que ocurrió realmente en Colombia¬¬? Lo que ocurrió días recientes no es para nada un acto de justicia; es un simulacro, una broma de muy mal gusto disfrazada de legalidad. Veámos: el pasado 20 de abril, medios internacionales como Semana, Infobae, El Tiempo, y El Heraldo, informaron que un juzgado de Barranquilla había ordenado un embargo contra Alex Saab, el operador financiero del chavismo por la módica cifra de 831 millones de peso, lo equivalente a 194 mil dólares; el hombre acusado de lavar más de 350 millones de dólares en Estados Unidos y de mover centenares de millones de dólares en contratos ficticios con sobre precios del programa alimenticio “Clap” en Venezuela y triangulaciones de oro, petróleo y paraísos fiscales, de acuerdo a las investigaciones del departamento de Justicia de EEUU por lo cual estuvo preso en esa nación y luego resultó favorecido en un intercambio por 10 rehenes norteamericanos, durante la administración de John Biden.

Esto no es justicia, es una burla institucional, un insulto a la inteligencia de todos los colombianos; un aplauso con guantes de seda contra alguien que ha hecho del crimen organizado una estructura continental.

Medida cautelar afecta a empresas vinculadas a Saab y toca a la exesposa de Saab, la empresaria venezolana Cynthia Eugenia Certain Ospina, quien fungía como subgerente de Shatex, S.A, y Jacadi de Colombia, dos firmas de papel para pasar exportaciones e importaciones ficticias.

La orden judicial de la juez Katia Margarita Redondo Ruiz exige que el dinero sea depositado en el Banco Agrario de Colombia, cumpliendo con “el debido proceso”. Muy bien, pareciera ser visto como “eficiente”, pero es escandalosamente insuficiente, porque mientras se firma ese embargo por una cifra menor al precio de una camioneta blindada, el Estado colombiano permitió en enero de este año que se le devolviera una mansión de 28 mil millones de dólares que la fiscalía le había incautado en el 2021. Está ubicada en Rio Mar, en Barranquilla, donde Saab no solo lavaba dinero, sino también la conciencia de quienes prefieren cerrar los ojos que enfrentar el poder.

Este embargo llega tarde. Con sabor a encubrimiento, porque no toca el corazón de la estructura criminal; no desmonta su red de testaferros, tampoco sus cuentas internacionales; no exige reparaciones, no activa la colaboración investigativa de organismos multilaterales; es una maniobra burocrática que huele más a cálculos políticos que a cualquier justicia real.



(La mansión que le había sido confiscada a Saab en 2021 por la Fiscalía colombiana y que ahora un Juzgado de Barranquilla le devolvió, está ubicada en el norte de esa ciudad neogranadina. Foto: Carlos Capella cortesía EL TIEMPO)

Por si fuera poco, mientras los medios colombianos reportaban la orden judicial en X, la cloaca digital del chavismo se movía en campañas desinformativas aduciendo que era una noticia falsa o “fake news” y un montaje, citaban una inteligencia artificial a la que suelen recurrir, sin pruebas y ninguna línea creíble, para desmentir lo que no les conviene que se conozca, con la misma narrativa de un Saab víctima, de héroe, bolivariano y patriota, cuando la verdad es otra: Saab es un engranaje del sistema de corrupción que sostiene la dictadura venezolana.

Y cada vez que la justicia actúa con timidez, tibieza y temor, se convierte en cómplice por omisión; embargarlo por 194 mil dólares es como lanzarle una servilleta a un tanque, una maniobra simbólica que no toca el fondo podrido de la trama.

¿Dónde están los jueces valientes que desmantelan la red completa?, ¿dónde están las órdenes de captura contra sus cómplices en Colombia?, ¿dónde está la justicia para una ciudadanía que ha sido saqueada en silencio por estos criminales con corbatas?

Colombia no necesita más de este tipo de decisiones a medias tintas; necesita romper el pacto con la impunidad que ha hecho del caso de Alex Saab un espectáculo sin consecuencia. Este embargo no es justicia, es una burla y no solo para los colombianos, es una burla contra todos los venezolanos; Alex Saab es el principal testaferro de Nicolás Maduro.

Más sobre el embargo ficticio contra Saab

De acuerdo a la medida de la juez Redondo Ruiz se ordenó el decreto y embargo de las “sumas de dinero que tengan o llegaren a tener los demandados Shatex S.A (...) Jacadi de Colombia (...) Alex Naim Saab Moran (...) y Cynthia Eugenia Certain Ospina”.

Y contempla “la medida cautelar por la suma de ochocientos treinta y un millones doscientos cuarenta y nueve mil novecientos novena y cuatro pesos con cinco centavos (...) correspondiente al valor de la liquidación del crédito”.

Ordenando, además que “dicha medida deberá ser inscrita siempre y cuando sean montos legalmente embargables y éstos no excedan los límites de inembargabilidad conforme al Decreto 564 de 1996 y normas concordantes”, añade el fallo.

En mayo de 2024, el empresario fue absuelto, en fallo de primera instancia, por los delitos de concierto para delinquir, enriquecimiento ilícito de particulares, estafa agravada, exportación o importación ficticia y, el más grave, lavado de activos, cita Semana.

Sin embargo, hay pruebas suficientes que demuestran que Saab estuvo detrás de la creación de cuentas y empresas del sector textil, fachada para mover grandes sumas de dinero. Empresas que registraron un incremento del 923 %. “Para exportar necesitaba contar con la capacidad para poder haber generado los insumos para la exportación, pues con mayor razón le demandaba realizar ese análisis, o por lo menos apreciar el análisis realizado por la Fiscalía, acogiéndolo o desestimándolo, pero sobre la base de reales pruebas relacionadas con lo debatido”.

Extracto del fallo judicial a favor de Saab, suscrito por la juez Katia Margarita Redondo Ruiz:



(Colombia necesita romper el tono de la complicidad; ese embargo es una burla a la justicia y contra todos los venezolanos)